En la vida se aprende a porrazos, porque uno aprende a levantarse. Muchas veces nos toca aprender y también nos toca enseñar, al margen si lo hacemos conscientemente o no.
Cuando estamos listos, algo sucede en la vida, donde todo el mundo parece contraerse en el corazón...una especie de implosión universal donde el presente cobra importancia, y las decisiones se desaparecen ante los ojos del razonamiento asediando la vista del corazón...y la fortificación desaparece, el castillo y las murallas se derrumban y quedamos desnudos, frente al frío o frente a la calidez. Pero esa desnudez es nuestra alma, es uno de los caminos directos hacia nosotros mismos.
...Y todo de nuestra alma se vuelca, movida por la "energía" del amor...
Aprende...y después aprende a volar, siempre escuchando el corazón...
No hay comentarios:
Publicar un comentario