Volando bajo, aleteando alto



Era un niño...
Lloraba escondido, jugaba escondido, hablaba escondido.

¿Cuál es tu nombre?

Jesús...

Jesús se convirtió en su otra mitad. El niño lo reconocía en su interior, pero no sabía quien realmente era, ni como llegó, ni de donde era.
La unica certeza y la verdad absoluta, era que podía conversar, contar sus problemas, pedir consejos, analizar lo negro y lo blanco.
Era un tipo de su misma edad, con ambas energías...varias veces lo intentó hechar, pero nunca pudo deshacerse de él.

Ahora el joven se ha convertido en adulto.

Cada vez desaparece un poco más la voz de Jesús, cada vez lo necesita menos...porque el camino que encontró, los ha hecho uno.

No hay comentarios: